Todos tenemos amigos que no conocen a Jesús. Si no los tienes, sal rápidamente y haz amigos… ¡ya! Tener amigos como ellos es fundamental para nuestra fe y nos instan una buena vida de oración.
Una de las formas clave de que tus amigos encuentren a Jesús es a través de la oración.
El poder de la oración no debe ser subestimado. Santiago 5:16–18 (NTV) nos dice: ≪La oración ferviente de una persona justa tiene mucho poder y da resultados maravillosos≫. Dios definitivamente escucha las oraciones, las responde oraciones y se mueve en respuesta a ellas. El poder de la oración no es el resultado de la persona que ora. Más bien, el poder reside en el Dios al que se ora; por lo que vale la pena hacerlo para que nuestros amigos conozcan a Jesús.
Te desafío a orar por 3 personas durante 3 minutos durante 30 días.
Simplemente elige a 3 personas que aún no conocen a Jesús, pon una alarma que te recuerde orar, y luego ora por ellos durante 3 minutos cada día durante 30 días consecutivos.
Esto puede ser el inicio de un hábito de oración saludable en ti, y puede cambiar las vidas de tus amigos.
¿Por qué no comienzas ahora mismo?
La oración mueve la mano que mueve al mundo. — Charles Spurgeon